martes, 26 de noviembre de 2013

Cómo la veo

Cuando ella despierta en la mañana, veo su cabello negro rizado todo desordenado, sus ojos a medio abrir iluminados por el sol, marrones como el delicioso chocolate.
Noto su sonrisa cuando me pilla observándola detenidamente. Sus mejillas empiezan a sonrojarse. Su rostro está sereno y su piel suave.

Su belleza se intensifica cuando se maquilla y camina con glamour en tacones. En el momento que llega a casa, está satisfecha por su día y suspira cansada.

A la noche, en la intimidad, es una mujer completamente diferente, toma el control de la situación, se perfuma y es sexy.
Ella es amiga, hija, estudiante, profesional y terca, una mandona, una jefa.

Así la veo, en ella se alojan muchas facetas distintas que la hacen la mujer que amo y deseo todos los días, y si me pidieran escoger, ella sería mi única opción.

2 comentarios: