Cuando sientes que todos tus esfuerzos no te llevan a ningún lado, cuando sientes que nada es suficiente, la amargura se aloja en tu pecho, impidiéndote respirar.
Tus verdades son solo eso, tus verdades, y a nadie más le importa.
¿Qué más da si no lo logras? Tus cargas son tuyas, tus logros, de todos, y tus fracasos, de tu autoría.
¿Realmente interesa que no alcances tus sueños? Los demás están triunfando, tomando tu lugar, no haces falta.
Nadie quiere a los perdedores, a esos que no brillan, a esos que no destacan, los que no se preocupan por ser felices.
Sin embargo, tienes esta sola vida para hacerlo, antes de caer en una caja de madera, y que sea cuestión de tiempo para que te olviden.
¿Que se puede añadir?
ResponderEliminarSe me ocurre que fortaleza para salir adelante.
Un cariñoso saludo. .
Excelente añadidura, me encanta. Saludos para ti también.
ResponderEliminar